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En un mundo donde todo es desechable, donde es más fácil y barato comprar algo que repararlo surge una técnica japonesa de reparar prendas.
En Japón el Sashiko Boro es considerado un arte y con eso una metáfora de que reparar para seguir usando puede alcanzar el máximo escaño de apreciación que tiene la humanidad. Se hace algo al respecto de las cosas cuando son demasiado buenas para dejarlas.
Hoy surge en el denim como una forma de expresión donde además de los parches tiene la costura a mano con un hilo grueso especial con el que hacen figuras como cruces, círculos y un remendado que es visible en todo momento.
Es la perfección con lo imperfecto, el remendado tiene la intención de ser visto y ser lo que luzca de la prenda, justo al revés que aquí donde escondemos que una prenda ya sea vieja y tenga hoyos o raspones.
Escribo este artículo mientras traigo unos jeans que compré hace años y que con el tiempo se han ido rompiendo en lugares extrañísimos. Los mandé a arreglar con la técnica Sashiko Boro y lo quiero aún más que antes. Hoy justo me los puse con una alegría increíble y fue cuando decidí compartir con ustedes el gusto de arreglar lo que normalmente tiramos.